La inteligencia artificial (IA) es una de las tecnologías más disruptivas del momento, que no para de crear nuevas oportunidades para mejorar la calidad de vida de las personas alrededor de todo el mundo mediante contribuciones en diferentes ámbitos y sectores como pueden ser la educación o la salud.

¿Pero, qué pasaría si estos algoritmos estuvieran "aprendiendo" a ser injustos? El efecto podría ser catastrófico. Por ejemplo, un algoritmo de búsqueda de empleo podría favorecer candidatos varones frente a mujeres, o asumir que las mujeres son más adecuadas para trabajos específicos como "enfermera" o "secretaria". Esa solución estaría sesgada y tendría un impacto negativo en nuestra sociedad. Por lo tanto, es necesario levantar nuestras voces y concienciar sobre la importancia de trabajar hacia sistemas que sean justos e inclusivos.

Hoy en día, nos encontramos estos desafíos a diario en el campo de la inteligencia artificial, debido en gran medida porque no hay una clara definición de qué es justo y que no. En esta sesión veremos los principales problemas asociados a los sesgos en nuestros datos y como podemos construir modelos que sean éticos, justos e interpretables.